«¿Alguno sabe cómo se dice “hazme sitio bajo esa
sombrilla” en alemán?», gritó el cabo entre risas jocosas antes de que una bala
de MG42 hiciera explotar su cráneo dentro del casco. Después ya no rió nadie,
algunos se echaron a llorar, otros gritaron, y el día se hizo insoportablemente
largo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario